La Biblia en un año #Dia83

1° Samuel 29-31

    David decidió apartarse del territorio Israelita para que Saúl dejara de perseguirlo, por lo que habitó en la ciudad filistea de Gat y le rogó a su Rey Aquis por un lugar donde vivir y allí permaneció por un año y cuatro meses. David salía a atacar los pueblos de esa región y se llevaba ovejas, vacas, burros, camellos y ropa  haciéndole creer a Aquis que atacaba a los israelitas. David no dejaba vivo a nadie; mataba a hombres y a mujeres, para que nadie lo acusara en Gat de todo lo que hacía y gracias a esto obtuvo la confianza de Aquis. 

    Los filisteos reunieron a su ejército para pelear contra Israel y Saúl tenía muchísimo miedo. Aquís quería que David fuese con él a pelear contra los israelitas, sin embargo, los jefes de sus ejércitos no quisieron pues David podría volverse contra ellos, por lo que David y sus hombres volvieron a la tierra de los filisteos. Cuando llegaron a la ciudad que Aquis les había entregado para vivir, se dieron cuenta de que los amalecitas los habían atacado y le habían prendido fuego a la ciudad y, aunque no mataron a nadie, se habían llevado como esclavos a mujeres, ancianos y niños. Entre las mujeres, se habían llevado a Ahinóam y a Abigail, las esposas de David. David lloró hasta no tener fuerzas, pero luego se animó y consultó a Dios lo que debía hacer... Buena fórmula no? podrás llorar hasta quedar sin fuerzas, pero luego recobras animo en el Señor y le consultas lo que debes hacer. Dios dijo a David que Persiguiera a los amalecitas, porque iba a alcanzarlos, y también iba a recuperar lo que se robaron. David los atacó, y mató a todos los amalecitas; recobró todo lo que los amalecitas se habían llevado, y también rescató a sus dos esposas. No faltó ningún niño ni adulto, y ni siquiera el objeto más pequeño, además de todas las vacas y ovejas.

     En la lucha contra los filisteos, hirieron de muerte a Saúl, por lo que dijo a su escudero que sacara su espada y lo matara antes de que llegaran los filisteos y terminaran de hacerlo; pero su escudero tenía tanto miedo que no se atrevió a matarlo, entonces Saúl tomó su espada y se echó sobre ella, de esta forma murió Saúl. En esta lucha también murieron sus hijos Abinadab, Malquisúa y Jonatán, el gran amigo de David. Así fue como el primer rey de Israel terminó su trágica vida derrotado y en desgracia, todo por haber dado la espalda al Dios que lo llamó.