domingo, 3 de julio de 2011

Tiempo de sanar


Un ser humano puede llegar a resistir y a sufrir de una manera asombrosa. Vamos forjando nuestra vida escribiendo páginas llenas de sentimientos y decimos querer lo mejor para nosotros mismos aunque esa idea se contraponga mucho a la realidad. Para ser sinceros siempre le damos un toque trágico y doloroso a nuestra historia, como si vivir sin esos ingredientes resultara aburrido. Existe un tiempo en el que podemos decir q el cansancio nos alcanzó; cansados de llenar nuestras paginas de tragedia, cansados de no poder ver mas allá debido a unos ojos empañados por la tristeza, creo que podemos estar fuertemente agotados de tener que curarnos el corazón.
Ciertamente la vida nos va presentando circunstancias inesperadas donde tendremos que poner en acción nuestro ser, sin embargo pienso que ya es suficiente el hecho de accionar con una actitud de derrota y de equivocación. No es mejor querer un mejor momento? Una mejor historia, un sin fin de instantes bellos! Dejar de pensar en un corazón en pedazos y que sea una sola pieza que podamos cuidar y proteger sin conducirla directamente a partirse de nuevo. Nuestro Señor sabe lo que queremos, al contar nuestras lagrimas se que solo desea ser el precursor de nuestra felicidad; El nos ha dado el poder de vencer, se que nos mira y ve solo lo mejor, tantas cualidades que nadie podrá jamás ver! El sabe, asi como lo sabe todo, podemos desear una vida sana y llena de luz; suyo es nuestro corazón! Es tiempo de que el Señor deje de estar solo en un rincón o una esquina de el, merece el centro! El mejor lugar; si El esta allí se que nuestras heridas sanarán y no nos dejará mirar atrás.


Ahora quiero y anhelo momentos mejores, sin aflicciones o frustraciones, sin que esto constituya una contradicción al camino que voy construyendo sino que los deseos vayan de la mano con la realidad. El detalle no es quien detenta el poder sino en creer! Y en este tiempo mejor de sanidad creo con absoluta seguridad en lo que espero para mi historia.