miércoles, 28 de diciembre de 2011

Te Encontré

Siempre me he imaginado en un pasado dando vueltas por ahí. en un espacio grande, grande, grande. un bosque tal vez... y allí me veo yendo de un lado a otro, haciendo nido en cada uno de sus árboles. árboles de soledad, de tristeza, de mentira, de pecado, de equivocación. en cada uno de ellos se podía construir una vida. Solo yo podía decidir cual. Siempre que caminé y caminé y otras tantas veces corrí, sentía a alguien detrás de mi. Podía sentir que a cada lado donde iba ese alguien me perseguía y me perseguía! yo estaba negada a ver... sencillamente no me importaba.

Así paso mucho tiempo, en el que yo seguía yendo de un lugar a otro y de un árbol a otro pero realmente sin dirección. Me veía joven, fuerte, llena de vida y de deseos por conocer, por experimentar cada cosa que los árboles ofrecían, y siempre donde estaba sentía esa persona tras de mi. a veces me preguntaba como no se cansaba de buscarme! El podía entender perfectamente que no me importaba ser su amiga, que no quería estar con el; sin embargo insistía. me regalaba nuevas oportunidades para sonreír pero yo estaba empeñada en no hacerlo, o por lo menos no como el quería. Yo era la dueña de mi vida, independiente, arrogante, con ganas de correr. no lo quería a el ni quería a nadie, solo quería dejar fluir todo lo que había dentro de mi, lo que pensaba que debía estar fuera cuando el me decía que debía someterlo.

Corrí por tanto tiempo! me cansaba y volvía a caminar... no encontraba un lugar! no encontraba un buen árbol para hacer mi nido. todos me eran insuficientes, todos parecían mostrar algo que sin duda no era lo que me haría feliz. y esa persona seguía mis pasos, cada uno de ellos! de verdad podía pensar que
solo alguien realmente bueno podía seguirme así a pesar de mi rechazo. solo alguien con muchísimo amor para dar podía se tan paciente. solo un ser supremo podía ir así tras de mi. un día no lo resistí más, estaba tan cansada. ya mis piernas no podían caminar más, ya los árboles no me brindaban sustento, ya la vida había dejado de ser tan emocionante por el solo hecho de ir de un lugar tras otro. y así caí, literalmente caí en medio del bosque y con las manos en mi rostro no sabía que hacer, sencillamente me sentía tan perdida! quería salir de ahí! y miré hacia atrás... seguía esa persona allí, me miraba con tanto amor! había paz en su rostro, sentía que me conocía demasiado porque siempre fue conmigo a todos lados, podía ver como para el era un libro abierto. cuando lo vi no pude resistirme más y quise conocerlo.

Esa persona extendió sus brazos hacia mi y me dijo que siempre me buscó, que tenia solo amor para darme, que veía en mi a alguien maravilloso lleno de virtudes, yo lo escuchaba y no lo podía creer. narraba mi vida como si la hubiese estado viviendo conmigo y realmente había sido así! me dijo también que buscarme no fue fácil, que yo estaba empeñada en no mirar, pero que jamás dejó de hacerlo porque sabia que con el comenzaría la historia de mi vida, que nada de lo que había vivido ese tiempo en el bosque iba a se como ahora, que era feliz porque yo, su hija, ya no estaría perdida. Corrí hacia EL! ya mis piernas no estaban cansadas!! estaba como nueva y así le di mi corazón! fue tan maravilloso ese encuentro que todavía se me eriza la piel. lo abrace por tanto tiempo, tenia miedo de perderme otra vez, no quería soltarlo. fue ahí ciando me dijo "mi amor, yo jamás te soltaré y no permitiré que tu te me sueltes de nuevo". iniciamos el más maravilloso de los viajes.! Nunca llegué a imaginar que podía amar así, que podía ser tan feliz.

Solo puedo recordar esa búsqueda como uno de los actos más bellos que Dios hizo por mi, como no desmayo, no dudó en hacerlo hasta que yo pudiera encontrarlo, a pesar de no ser fácil lo hizo todo por mi! mi amor, mi compañero, mi vida..! cuanto hubiese querido haber volteado antes! pero quizás, de haberlo hecho, ese encuentro no tendría tanta importancia para mi. Los árboles siguen ahí! mucha gente sigue haciendo en ellos sus nidos, pero yo? yo ya encontré mi lugar.

domingo, 3 de julio de 2011

Tiempo de sanar


Un ser humano puede llegar a resistir y a sufrir de una manera asombrosa. Vamos forjando nuestra vida escribiendo páginas llenas de sentimientos y decimos querer lo mejor para nosotros mismos aunque esa idea se contraponga mucho a la realidad. Para ser sinceros siempre le damos un toque trágico y doloroso a nuestra historia, como si vivir sin esos ingredientes resultara aburrido. Existe un tiempo en el que podemos decir q el cansancio nos alcanzó; cansados de llenar nuestras paginas de tragedia, cansados de no poder ver mas allá debido a unos ojos empañados por la tristeza, creo que podemos estar fuertemente agotados de tener que curarnos el corazón.
Ciertamente la vida nos va presentando circunstancias inesperadas donde tendremos que poner en acción nuestro ser, sin embargo pienso que ya es suficiente el hecho de accionar con una actitud de derrota y de equivocación. No es mejor querer un mejor momento? Una mejor historia, un sin fin de instantes bellos! Dejar de pensar en un corazón en pedazos y que sea una sola pieza que podamos cuidar y proteger sin conducirla directamente a partirse de nuevo. Nuestro Señor sabe lo que queremos, al contar nuestras lagrimas se que solo desea ser el precursor de nuestra felicidad; El nos ha dado el poder de vencer, se que nos mira y ve solo lo mejor, tantas cualidades que nadie podrá jamás ver! El sabe, asi como lo sabe todo, podemos desear una vida sana y llena de luz; suyo es nuestro corazón! Es tiempo de que el Señor deje de estar solo en un rincón o una esquina de el, merece el centro! El mejor lugar; si El esta allí se que nuestras heridas sanarán y no nos dejará mirar atrás.


Ahora quiero y anhelo momentos mejores, sin aflicciones o frustraciones, sin que esto constituya una contradicción al camino que voy construyendo sino que los deseos vayan de la mano con la realidad. El detalle no es quien detenta el poder sino en creer! Y en este tiempo mejor de sanidad creo con absoluta seguridad en lo que espero para mi historia.