domingo, 26 de junio de 2016

La Biblia en un año #Dia165

    Salmos 67-72 

    La Palabra de Dios exhorta a todas las naciones alrededor del mundo a que deberían adorar a su Creador, es decir, a nuestro Dios, el Rey de toda la tierra. Todos los pueblos deben a Dios su alabanza, pues en todos los lugares es conocida su salvación; entonces la tierra dará su fruto y nos bendecirá el Dios nuestro. El Señor es el padre de los huérfanos y el defensor de las viudas, quien hace habitar en familia a los desamparados y saca a los cautivos a prosperidad; a los que le temen le muestra su favor, esparciendo abundante lluvia y reanimando al pueblo exhausto; por su bondad le provee al pobre y defiende de los opresores al oprimido. El Señor siempre levanta la causa del desvalido, del que necesita apoyo y sustento; cada día nos colma de beneficios y nos libra de la muerte. Por eso hoy y siempre, todos los reinos de la tierra deben temer a Dios. Todos los que buscan al Señor, y aman su salvación pueden mantener el gozo y la alegría, pueden decir: Engrandecido sea Dios.

    Al comienzo de este reto, cuando aún leía la historia de Abraham en el génesis; pude notar que aún a avanzada edad este gran hombre de Dios siguió siendo muy prospero y productivo; ya casi llegado a los 100 años recibió el cumplimiento de su promesa con la llegada de su hijo Isaac, también debió enfrentar su más dura prueba, y aún antes de morir procrearía por lo menos 8 hijos más. Así que, la ancianidad no era un problema para Abraham. El Salmo 71 relata la oración de un anciano, creo que aquí encontramos la gran diferencia; personas que aún en sus canas desean hacer de Dios su refugio, su roca y su fortaleza. La vida no termina hasta que Dios decide que termine, así que, este Salmo sin duda anima a toda persona mayor a seguir anunciando las virtudes de Dios. Me imagino (porque no puedo saberlo), que envejecer no es sencillo, desmejoras físicamente y tu animo decae; pero también pienso que cada etapa de la vida trae consigo ciertos retos y exigencias que poco a poco vas superando a medida que vas viviendo, por eso creo que para los ancianos también hay fortaleza, vigor, seguridad, aliento, ánimo y esperanza. es cierto que los ancianos pueden estar limitados por muchos factores, pero también son beneficiados por otros; por eso sus almas puede mantenerse alegres cantando al Señor, haciendo memoria de todas sus bondades, hablando de su justicia todo el día y anunciando sus poderosos hechos. Como bien lo dice la Escritura: Todo tiene su tiempo. Por cierto, no pude evitar pensar en mis abuelas mientras escribía estas lineas, mis abuelos ya murieron; a pesar de que ellas han creído en el Señor, espero que cada día puedan ser aún más llenas de Él para que puedan tener esta fuerza y este estimulo que solo se halla en su presencia.

    Un rey que busca a Dios, es un Rey que gobernará con éxito y prosperidad; Salomón, como buen hombre sabio, más que todos en la tierra, buscó la presencia de Dios para que le fuese concedido el gobernar con rectitud y justicia sobre el pueblo de Dios. Librar a los pobres, salvar a los afligidos, ayudar al necesitado y al desvalido; son algunas de las acciones que este líder, y que muchos lideres desean hacer cuando asumen el poder; pero Salomón si estaba claro en algo, solo Dios podía hacer posibles todas estas maravillas, sin su ayuda y sin su intervención en la nación, no podían ser prosperados. Aunque estas palabras escritas por Salomón se parezcan mucho a un mensaje de campaña política, no lo son, son la verdadera esencia del éxito de un reino o gobierno; que la fama del rey permanezca, que haya mucho trigo, que se le de valor a la vida del pueblo, que la gente no sea tratada con violencia, que reine la justicia; todo esto se logra si el rey desea ser justo como Dios, y gobernar con la misma rectitud. Y no lo olvidemos, Dios al que le pide, le da.


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